domingo, 8 de abril de 2012

¿Ése hombre es malo?

¿A quién conocemos realmente? ¿Conocemos a alguien realmente? ¿Quién es tu amigo? ¿Quién es tu hermano? ¿Quién es tu madre?

En verdad conocemos a estas personas tan cercanas y a las que tanto queremos y respetamos, o sólo creemos conocerlos. ¿Un individuo es igual visto por todas las personas? ¿Todos opinamos lo mismo de tal o cual ser?

Cuántas veces en la vida hemos escuchado la siguiente situación:

-            Un hombre: Ese Profesor es de lo peor, no sabe hacer su trabajo, lo hace de mala voluntad.
-            Otro hombre: No, no te creas, a mi me parece un buen profesor, sólo hay que interpretarlo correctamente.

O esta otra

-            Un hombre: Ese hombre es de lo peor, es un estafador, un delincuente.
-            Otro hombre: No no no, en verdad no lo conoces, él es un buen hombre, nunca haría eso.

Les ha pasado ¿verdad?… Analizando estas situaciones, ¿Cuál conoce realmente a él hombre del que hablan? Uno de ellos cree conocerlo y tiene su opinión al respecto pero el otro lo desmiente y le replica que en verdad no lo conoce, es más que si lo conocería nunca diría eso que afirma con tanta seguridad.

Entonces… ¿Qué es lo que uno conoce del otro ser? Yo creo que nadie conoce verdaderamente a nadie ya que es imposible para un hombre juzgar actitudes de otro hombre, ya que siempre habrá distintos puntos de vista que serán correctos desde bases racionales diversas.
Mi conclusión es que uno no conoce el alma del otro sino que conoce las acciones del otro realizando una tarea. ¿Me comprenden? Lo que quiero decir es que uno conoce lo que el otro hace, no lo que el otro es.

Nadie puede discutir que Roger Federer es un excelente tenista, o que Gandhi era un gran líder. Lo que uno si puede discutir es sobre como es Federer o sobre como es Gandhi ya que es imposible de conocerlo realmente, un ser humano puede actuar de maneras opuestas en distintas situaciones, lo que quiere decir que es un ser impredecible, son desconocidos su futuro y sus decisiones.

El Hombre tiene el poder de reflexión y de razonamiento, lo que lo hace único. Estas características tan extraordinarias… ¿Le permiten al hombre cambiar su forma de actuar? ¿Le permiten que sea bueno ante unos y malo ante otros? La respuesta es sí, claro que el hombre cambia y muta constantemente, una misma persona puede parecer completamente descortés y vulgar para unos y una maravilla de bondad y caridad para otros…

Para reflexionar...

No hay comentarios:

Publicar un comentario